El pasado fin de semana se celebró en Valencia la segunda edición del festival She's The Fest en el centro creativo Las Naves. Este es un festival enfocado a realzar la figura de la mujer dentro de la música y, por tanto, las diferentes bandas presentaron sus variopintos proyectos siempre encabezados por voces femeninas. Pudimos ver un amplio abanico sonoro, yendo del pop más atmosférico al blues rock más directo. El festival se celebró entre el viernes 30 de septiembre y el sábado 1 de octubre. Bajo un manto de luces y custodiado por recatados naranjos, el público pudo disfrutar entre concierto y concierto de una cerveza bien fría.
Encontramos dos escenarios diferentes en los que poder asistir a cada actuación, uno en el patio llamado “escenario terraza” y otro llamado “escenario Alhambra”, situado en el auditorio. Cabe señalar que a pesar de que el primero estaba situado en el exterior, el sonido estuvo bastante equilibrado aunque es más que reseñable la diferencia con el situado dentro del auditorio, donde todo sonaba mucho más compacto. Los encargados de estrenar las tablas del escenario terraza fueron Papaya con su flamante nuevo Ep de tintes ochenteros en los que tratan temas universales mientras derrochan chulería en un bien trabajado directo. Seguidamente pasaba por este mismo escenario la valenciana Chlöe's Clue haciendo gala de un pop intimista y dejando buen sabor de boca.
A continuación cambiamos de escenario y nos dirigimos al Alhambra donde los castellonenses Ruth Baker Band con su look vintage hicieron gala de un soul rock muy apasionado y con una gran voz, que hizo mover el esqueleto a más de uno. Y de vuelta a la terraza, los madrileños Terrier consiguieron exorcizar las penas con su pop de tintes naive destilando buen rollo. Por su parte Carmen Boza subió la apuesta de la jornada armada con su fragilidad y delicadeza. La afluencia y la entrega del público fue más que considerable y pudimos comprobar que estaba más que justificado, en un directo en el cual no sobró ni faltó nada.
Y ya de madrugada, la primera jornada la cerraba Brigitte Laverne con sintetizadores electro pop. La barcelonesa envolvió el auditorio entre densas atmósferas que hicieron las delicias de todos aquellos que, dadas las horas, querían dar rienda suelta a su cuerpo.
01 de octubre
La segunda jornada de She's The Fest dio el pistoletazo de salida con las bandas locales Moonflower y Mantequilla Voladora, cuya presencia se debió al concurso Sona la Dipu. Precisamente los ganadores del mismo, Meridian Response, abrieron la tarde con su dream pop y teniendo que lidiar con un público que parecía más centrado en su propia conversación que en el propio concierto. Aún así, supieron transmitir un directo con muchos matices y lleno de dinámicas atmósferas. Seguidamente, el dúo catalán Carla debutó en tierras valencianas pero no terminó de convencer con su synthpop, y todo ello a pesar de que la chilena Soledad Vélez subió al escenario acompañándoles durante una canción.
De nuevo en el auditorio, los madrileños Morgan deslumbraron al público con su blues rock. Una potente Carolina de Juan, también conocida como Nina, arrolló con su voz acompañada de una deslumbrante guitarra y una base rítmica sólida y poderosa. Cada canción acababa con largos aplausos de la audiencia y todos acabamos pidiendo más. Tanto fue el alboroto general que aclamados por los asistentes realizaron dos bises para finalizar el concierto. Su éxito fue redondo y merecido. El toque internacional del festival femenino lo dieron las inglesas Peluché. Con un rico amalgama sonoro que nos trasporta por momentos hacia Vampire Weekend, el trio fue una grata sorpresa aunque tal vez hubiera lucido más en el auditorio. Una banda interesante a la que seguir la pista.
El plato fuerte de la noche era Zahara, y no decepcionó a su público. Entregada desde el primer momento, bajó del escenario para marcarse un baile y así meterse a todo el mundo en el bolsillo. Sus fans no dejaron de acompañarla en cada una de las canciones y se atrevió incluso a encajar un pedazo de "Te debo un baile", de Nueva Vulcano, en el que fue uno de los últimos conciertos de su gira de presentación de su nuevo disco Santa. Con un sonido rico y con un magnífico saber estar en el escenario, el suyo fue el concierto más aclamado del festival.
Y ya hasta el fin nos quedamos en el auditorio para presenciar en primer lugar el concierto de Rural Zombies. Con tintes de sus paisanos Belako, mostraron fuerza sobre el escenario con su rock bailongo que propulsó los pies de la audiencia a darse algún que otro baile. A pesar de la energía de su música, fue el púbilco quien incitó a la líder de la banda a soltarse la melena y a medida que transcurrió el concierto la pudimos ver más relajada. Los encargados del cierre fueron Fuckaine, que sufrieron el agotamiento general y pudimos ver escasos asistentes en su frenesí punk.
Tras los conciertos la fiesta siguió La3, a cargo de los dj's María Forqué, Ladrillovitz e Indira Paganotto.
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