Este FIB nos hace tambalearnos entre la nostalgia y la decepción
El Festival Internacional de Benicàssim (FIB), conocido por su capacidad para reunir a destacados artistas y ofrecer experiencias inolvidables, celebró su 28ª edición del 18 al 20 de julio de 2024. Sin embargo, esta edición se caracterizó por una mezcla de momentos brillantes y problemas técnicos y organizativos que dejaron un sabor agridulce entre los asistentes.
Yungblud, FIB 2024 – Foto realizada por Juan Jesús Gregori para Indieofilo©
Preparativos y ambiente previo
A pesar de la venta sin incidentes de las entradas y la promesa de un cartel atractivo, los problemas comenzaron con la llegada de los asistentes al recinto. Las largas colas para recoger las pulseras y la confusión en la organización pusieron a prueba la paciencia de muchos, unas instalaciones que tienen que albergar a lo largo del año al menos tres festivales, debería de tener una buena remodelación para mejorar los accesos. En principio desde el consistorio se ha anunciado que habrá una inversión para poder mejorar esta situación, estaremos atentos para ver cómo se soluciona.
Mike Kerr de Royal Blood, FIB 2024 – Foto realizada por Juan Jesús Gregori para Indieofilo©
Jueves 18 de julio: Un inicio problemático
El jueves, el FIB 2024 abrió sus puertas a más de 45.000 amantes de la música. The Libertines inauguraron el Heineken Stage, un sol de justicia nos golpeaba a nosotros y al grupo, fue extraño ver a Pete Doherty sobrio y no totalmente desfasado y cantando a la suya, sin embargo, aun así, generó dosis de nostalgia con clásicos como “Can’t Stand Me Now” y “Don’t Look Back Into The Sun“.
Pete Doherty de The Libertines, FIB 2024 – Foto realizada por Juan Jesús Gregori para Indieofilo©
Arde Bogotá, con su potente directo, fue uno de los puntos álgidos de la jornada, manteniendo al público entregado donde soltaron a los perros por habernos escapado y disfrutar de su álbum Cowboys de la A3 (2023). Sin embargo, la noche se vio marcada por los problemas técnicos que afectaron la actuación de Black Eyed Peas. El grupo estadounidense sufrió un apagón de sonido al inicio de su actuación, dejándolos fuera del escenario durante 15 minutos y, cuando regresaron, el sonido seguía siendo deficiente. La frustración del público se manifestó en redes sociales, y muchos asistentes abandonaron el concierto, describiéndolo como una de las peores experiencias del festival. A pesar de estos problemas, otros artistas lograron salvar la jornada.
Antonio García de Arde Bogotá, FIB 2024 – Foto realizada por Juan Jesús Gregori para Indieofilo©
Lori Meyers ofreció un directo sólido y lleno de energía, contando con la colaboración Manola (teclista de Rufus T. Firefly), mientras que Jess Glynne emocionó con sus éxitos “Rather Be” y “Hold My Hand“, aunque no llegaría a firmar una de sus mejores actuaciones al estar muy estática durante todo el concierto. En los escenarios secundarios, bandas como Veintiuno y Varry Brava mostraron la fuerza de la música nacional, destacando Siloé como uno de los futuribles de escenarios principales con un directo muy potente que consiguió enganchar al público desde la primera canción y empezando el concierto el cantante desde una pequeña tarima situada entre el público.
Viernes 19 de julio: Persisten los problemas técnicos
El viernes, la segunda jornada del festival, no estuvo exenta de problemas. Yungblud, uno de los artistas más esperados, sufrió fallos técnicos que interrumpieron su actuación. A pesar de estos inconvenientes, Yungblud demostró su profesionalidad y carisma, manteniendo al público animado con temas como “Parents” y “Strawberry Lipstick” y montando el primer gran pogo del festival. Milky Chance y The Vaccines ofrecieron actuaciones memorables en el Heineken Stage, destacando por su energía y conexión con el público. En el Repsol Fiber Stage, Karavana y Sexy Zebras brindaron shows llenos de intensidad, mientras que Elyella cerró la jornada con una fiesta que mantuvo a los asistentes bailando hasta el final.
Justin Young de The Vaccines, FIB 2024 – Foto realizada por Juan Jesús Gregori para Indieofilo©
Sábado 20 de julio: El clímax del festival
El sábado, último día del festival, alcanzó su punto álgido con actuaciones de alto calibre. Royal Blood, a los que nuestra compañera Esther había visto hace un par de días en su concierto en sala en Barcelona, encabezó la jornada con su poderoso rock, presentando éxitos como “Out of the Black” y “Figure It Out” y donde el batería decidió organizar un buen pogo en donde continuamente había mareas de personas bailando como locas. Miles Kane trajo su estilo único con “Don’t Forget Who You Are” y “Coup de Grace“, mientras que artistas como Cala Vento, La Paloma y Besmaya ofrecieron actuaciones vibrantes en el Heineken Rising Stars Stage. Dorian cerró el escenario principal con un set lleno de energía, seguido por Delaporte en el Cutty Shark Stage, que montó una fiesta llena de confeti y saltos al público.
Miles Kane, FIB 2024 – Foto realizada por Juan Jesús Gregori para Indieofilo©
Conclusión: Descontento generalizado y futuro del festival
El FIB 2024, con 135,000 asistentes según los datos de la organización, fue una edición marcada por la nostalgia y una pequeña parte de decepción. Los fallos técnicos, algunos problemas de organización y las quejas sobre las recargas y las colas del primer día ensombrecieron las actuaciones memorables de algunos artistas. Por nuestra parte esperamos que en la próxima edición haya más artistas internacionales en el cartel y más representación femenina en el escenario principal. Esta edición ha tenido momentos brillantes, pero deberá trabajar arduamente para recuperar la confianza del público y mejorar sus estándares de calidad si desea mantener su estatus como uno de los festivales más importantes de Europa. La edición de 2025 será crucial para redimir su legado y garantizar una experiencia a la altura de su prestigiosa historia.
¿Que opinas?
Mostrar comentarios / Dejar un comentario