El americano Eli "Paperboy" Reed llegaba a la capital holandesa una semana antes del lanzamiento del que será su quinto disco de estudio My Way Home, que como hemos podido escuchar en el streaming de NPR sigue mostrando las raíces del de Boston; American blues, country y rock 'n' roll. El show en la sala Bitterzoet arrancó puntual y con Eli como un ciclón interactuando con el público, demostrando no solo que su reconocida fama de showman es merecida si no que los temas del nuevo disco como "Your Sins Will Find You Out" o "Hold Out" tienen presencia y fuerza.
Así en la primera parte, además de servir de carta de presentación del nuevo disco con una gran presencia de temas nuevos, destacarían "Alright Now" y "Tomorrow's Not Promised", con la guitarra de Reed como principal protagonista y una unión entre miembros impecable, aunque la segunda mitad del concierto la superaría tanto en ritmo como en respuesta por parte del público. Con el plus que aportó J.B. Flatt a los teclados y el propio Eli cantando fuera de micrófono a grito pelado, y gracias a temas más conocidos por la audiencia como "It's Easier", "Stake Your Claim" o "Don't Let Me Down", la banda fue preparando el terreno para una final apoteósico con "Come and Get It" y "Explosion". Aun habría tiempo para unos bises correctos, en los que quizás la sorpresa inicial de la banda cantando a capela eclipsó el global y dejó un pequeño regusto amargo para un concierto en el que los temas nuevos tuvieron mejor acogida de la esperada y tanto Eli como su banda demostraron que su calidad está fuera de toda duda y que son un valor seguro en directo.
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