Cruïlla 2018 – 12 de julio de 2018 (Parc del Forum – Barcelona)

El Festival Cruïlla 2018 arrancaba ayer con una novedosa jornada en jueves en la que se inauguraba el escenario principal obra de Lluís Danés con las actuaciones de Jack White, Enrique Bunbury y Seasick Steve.

Seasick Steve, Festival Cruïlla 2018, Barcelona (12/07/2018) – Foto proporcionada por la organizacion del Cruïlla Festival

La jornada arrancaría precisamente con este último pasadas las 19:00 ante unos 1000 espectadores que buscaban desesperadamente la sombra proyectada por el escenario para resguardarse de las altas temperaturas que azotaban el parc del Forum. El veterano californiano Seasick Steve mostró un estado de forma envidiable tocando un sin fin de instrumentos personalizados por el mismo (Guitarras-banjo con matrículas o con diversas latas), a la vez que no paro de intercambiar opiniones con el público. Su blues sureño fue calando poco a poco en un público algo apático, que comenzó a meterse en el espectáculo cuando el propio Seasick subió al escenario a una adolescente para cantarle "Walkin' Man" y que acabaría bailando con temas como "Can You Cook" o la inédita "We Hate The Winter".

Jack White, Festival Cruïlla 2018, Barcelona (12/07/2018) – Foto proporcionada por la organizacion del Cruïlla Festival

Cerca de una hora después, y con algo de retraso sobre el horario estipulado, saltaría al escenario la gran estrella de la noche, su compatriota Jack White. Encarnizado defensor de la esencia del blues, sus primeras palabras fueron para agradecer a Seasick su actuación, para a continuación arrancar su espectáculo con "Over and Over", tema que también abre su último disco Boarding House Reach (2018). A partir de aquí, el show se dividió entre lo meramente musical y el espectáculo que el propio Jack White crea a su alrededor; cambios de guitarra dentro de la misma canción, tres micros con diversos efectos o un histrionismo desbordante consiguen que por momentos las canciones queden en un segundo plano muy lejano.. Y es una pena, porque ya bien sea por su carrera en solitario o con las pinceladas de todos los grupos de los que ha formado parte, construye un concierto de altos quilates. Es cierto que sus temas con The White Strypes, The Raconteurs o The Dead Weather son los que tienen más tirón entre el público ("Hotel Yorba" o las magníficas "The Hardest Button to Button" y "Steady, as She Goes"), pero es precisamente en temas como "Lazarretto" o "Would You Fight for My Love?" cuando su sonido alcanza una mayor riqueza a base de distorsiones de guitarra, sintetizadores o una batería por cierto recuerda quizás en exceso a su ex-compañera Meg White. Tras poco más de una hora de concierto, White cerrará su concierto con el himno "Seven Nation Army", contentando a la mayoría de un público que esperaba ansioso solo esa canción y dejándonos a unos cuantos con ganas de más; de temas propios, de alguna versión al estilo de “Jolene”, de algún tema extra de The Dead Weather o de esos acordes mágicos de "Fell in Love With a Girl".

Enrique Bunbury, Festival Cruïlla 2018, Barcelona (12/07/2018) – Foto proporcionada por la organizacion del Cruïlla Festival

Para cerrar la noche inaugural, el escenario principal recibía al aragonés Enrique Bunbury, que volvía al festival tras su actuación en 2016 y a la ciudad condal tras sus dos conciertos del pasado mes de diciembre en la sala Razzmatazz. Ante un enfervorizado público que no paró de corear cada una de sus canciones, el zaragozano arrancó su concierto centrándose en su último disco Expectativas (2017), del que sonaron encadenadas "La Ceremonia de la Confusión", "La Actitud Correcta", "En bandeja de plata" y "Cuna de Caín". Tras un pequeño discurso, Enrique viajó en el tiempo para traernos una versión semi acústica de "Héroe de Leyenda", y a continuación empezar a recorrer su ya amplia discografía como "El Anzuelo", "Despierta", "El Hombre Delgado que no Flaqueará Jamás" o "Hay muy Poca Gente" que sirvieron para poder disfrutar en todo su esplendor de Los Santos Inocentes, banda que con diversos nombres e integrantes le ha acompañado desde hace años y cuya calidad en directo es impresionante. Con el público rendido, la versión de "Héroe de leyenda" fue un pequeño jarro de agua fría por que el exceso de percusión, teclados y saxofón al estilo latino consiguen hacer sonar extraño uno de los temas bandera de la década de los 80, aunque el concierto recuperaría el ritmo de crucero con la concatenación de éxitos del ya lejano Pequeño (1999) como "De Mayor", "El Extranjero" e "Infinito", donde el acordeón de Jorge Rebenaque destacó por encima del resto. Aún habría tiempo para más éxitos como "Si", "Maldito duende" o la también ralentizada "Lady Blue", pero hacía tiempo que Bunbury ya se había posicionado por méritos propios como el gran ganador de la noche gracias a su conexión con el público y a un sonido majestuoso.