Tras una primera jornada marcada por la presencia de la electrónica como leitmotiv principal del Pitch Festival, el segundo y último día de esta exitosa tercera edición nos aguardaba con algunas de las bandas independientes mas prometedoras de lo que llevamos de año, Chvrches y AlunaGeorge, así como la actuación de unos veteranos de esto como los suecos Junip, y, sin lugar a dudas el hype del momento, el dúo de electrónica inglesa Disclosure.
Cerca de las 15:45 (Para que luego nos quejemos en España de lo pronto que empiezan las jornadas de algunos festivales) hacia presencia sobre el escenario Junip, o lo que es lo mismo, Jose Gonzalez y cia. Porque no nos engañemos, el autor de temas tan memorables como «Heartbeats» o «Crosses» es la cabeza pensadora y ejecutora de este proyecto en el que se hace rodear hasta por 5 músicos. Con ellos alcanza una riqueza instrumental que en ocasiones se superpone a sus frágiles melodías, pero en el global del concierto se puede afirmar que el autor sueco ha llegado a un nuevo nivel que hace de cada uno de sus shows algo memorable, que merece la pena ser guardado en un pequeño espacio de la mente para disfrutar posteriormente sin la presencia de tanta gente, mejor en soledad.. En esta ocasión, se centraron en presentar su recién publicado segundo disco homónimo, aunque también tuvieron cabida pequeñas joyas de su anterior trabajo como «In Our Nature» o «Howl». La superposición de escenarios nos hizo tener que elegir entre una de las grandes promesas para el próximo año, la danesa Mø, la sensación en electrónica S O H N o el proyecto alemán Brandt Brauer Frick Ensemble, en el que el colectivo centrado principalmente en la electrónica Brandt Brauer Frick se hace rodear de una mini sinfónica que incluye violines, cellos e incluso una tuba. Su show, pasados los instantes iniciales en los que sorprende la fusión de estilos, pasa a ser un poco monótono debido a la excesiva presencia de los instrumentos de cuerda. Así pues, buena intención pero mala ejecución.
En un cambo de tercio bastante notable nos fuimos a ver al ídolo de bodas en el mundo árabe Omar Souleyman, que ha sido elevado al nivel de icono de la modernidad gracias a sus discos en Sublime Frequencies o sus shows en Coachella o Sonar. Acompañado solo por un único músico encargado de lanzar bases a diestro y siniestro, el artista sirio ofreció un show espectacular en el que resultaba tan hipnótica su especial indumentaria como su habilidad para mover a las masas, consiguiendo que el público bailase sin parar durante los cerca de 45 minutos que duró su show. Tras una merecida pausa buscando algo de aire, llegaba el momento mas esperado por un servidor, el concierto de los escoceses Chvrches, que a base de singles que alcanzan el nivel de hits en pocos días han revolucionado la escena musical británica. Con la frágil belleza de Lauren Mayberry como primera carta de presentación sobre el escenario, la banda ofreció un concierto redondo en el que destacaron sus ya conocidas «The Mother We Share«, «Recover» y «Gun«, pero en el que el resto de canciones (incluida una cantada por Martin Doherty) mantuvo el alto nivel. Tras el excelente concierto, solo nos queda esperar con mas ganas que antes el lanzamiento de su deseado primer disco..
Tras este subidón de adrenalina, era el momento de acercarnos a la presentación en sociedad que el danés TrentemØller iba a hacer de su último disco Lost. En un escenario lleno de niebla artificial en el que se intuían hasta 6 músicos, el arranque del show fue espectacular con una sucesión de beats que retumbaban en lo mas profundo del cuerpo y te hacían meterte de lleno en el show. Sin embargo, la aglomeración de público y el alto calor reinante en la carpa hicieron que fuese insoportable mantener ese ritmo, tanto para el artista como para los fans que se encontraban entre la marabunta. Por desgracia, a los 20 minutos poco quedaba ya del ímpetu inicial y el show fue decayendo en ritmo y pasión, por lo que la decisión de marchar al otro escenario para ver a los ingleses AlunaGeorge se volvió mucho mas sencilla de lo esperado. La banda de Londres cuenta con una de las puestas en escena mas sencillas posibles, pero el indomable caracter de su lider Aluna Francis que se movió por todo el escenario como si corriese una maratón, hizo que el público respondiese bailando y coreando sus temas ipso facto. Los ritmos ochenteros de «You Know You Like It» o «Your Drums, Your Love«, junto con unas poderosas bases en «Body Music» sirvieron como catalizadores hasta que llegó el momento cumbre de la noche, la interpretación de «White Noise» de Disclosure en la que la propia Aluna pone las voces y con el que la público bailó hasta la extenuación. Por todo ello, excelente concierto que sirvió para demostrar que son una banda que pude ir mas allá de unos cuantos singles, a la espera de lo que demuestre finalmente su primer disco Body Music que se publicará en unas semanas.
Casi sin fuerzas, y tras una instantes en uno de los magníficos trozos de césped disponibles en el recinto, marchamos a una de los escenarios mas pequeños del festival en el Transformatorhuis donde disfrutamos durante unos instantes de la sesión que ofrecía el británico Lukid, que gozó de un buen número público que bailaba al ritmo de sus asincopados ritmos hasta que se acercó la hora del inicio del concierto del gran reclamo del día, los también ingleses Disclosure. Los hermanos Lawrence presentaban en la capital holandesa su recien estrenado disco Settle, que salió a la venta hace poco mas de un mes y que les ha llevado a ser la gran esperanza de la electrónica mundial. Con un setlist y un sonido impecable, se ganaron al público de manera inmediata a base de ritmos bailables y unas proyecciones y juegos de luces increíbles que hacían imposible no ponerse a bailar inmediatamente, mas aun cuando suenan encadenados temas como «You & Me«, «White Noise» o «Voices«, así como una excelente versión de «Running» de Jessie Ware. Pasadas las 00 de la noche, y con el cansancio acumulado de dos dias de buena electrónica, este fue el broche final a un excelente fin de semana en el que solo nos queda desear que dentro de un año se vuelva a repetir este maravilloso festival.
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