¡Animo valiente¡ es lo primero que nos grita este nuevo grupo en su disco de reciente publicación.. Sin lugar a dudas toda una declaración de intenciones de un grupo diferente, bien sea viéndolo desde el nombre del grupo o desde su formación, donde destaca la variedad de perfiles de músicos provenientes de Tachenko o la banda que acompaña al grandísimo Nacho Vegas. Miembros que dan origen a un proyecto llamado León Benavente, inspirado en la historia de un viaje en coche que deja tirado al guitarra Luis Rodríguez y que se basa en la reconocida y castiza expresión “entre Pinto y Valdemoro”.. Inquietante cuanto menos.
Poseedores de un sonido diferente, con mezclas de estilos que van desde el rock más puro hasta sonidos electrónicos con letras en las que la destrucción de los paisajes creados es una constante, la mayoría de las canciones se basan en una percusión que mantiene el ritmo hasta que en determinado momento llega el momento álgido con la correspondiente subida de bajos. Son canciones que recomendamos escuchar en movimiento, puesto que su energía se transforma en multitud de sensaciones: Ansiedad, rabia, superación, desilusiones encolerizadas.. Su amigo y mecenas Nacho Vegas dice de este trabajo que es un disco para escuchar en orden, para vivir un viaje que plantean. Sin embargo, cada tema puede ser individualizar una sensación distinta, sin tener que recurrir a la secuencia propuesta en el disco. El colofón llega con la maravillosa Ser Brigada, que sin lugar a dudas se va a convertir en un tema mítico, o por lo menos desde nuestro prisma tiene las virtudes necesarias para serlo. Así pues nos encontramos ante un disco atemporal y viajero, que te transporta a sitios dispares, bajo letras que nos presentan lugares míticos o épocas pasadas que en muchos casos, y mediante escenas propias de la ciencia ficción, se convierten en historias llenas de caos y desolación. Muy recomendable. ¡A disfrutarlo Valientes!
