El pasado 21 de Abril, con motivo de las fiestas de Primavera de L’Hospitalet de Llobregat, se pudo disfrutar en el recinto de La Farga de una especie de histeria colectiva por catar las nuevas canciones de Love of Lesbian, grupo que representa como pocos el auge del indie nacional hacia las grandes masas, aunque sin dejar lado la originalidad o la calidad. Gente de todas las edades, con sorprendente presencia de quinceañeras y adultos por encima de los 40, esperaba con ansias la presentación de los nuevos temas que formarán parte de La noche eterna. Los días no vividos, quinto disco de estudio en castellano de los catalanes que se espera para finales de mayo.
Los encargados de abrir la noche e incluso competir en horario con el futbolero Barça-Madrid (el bajista de la banda iba enfundado en la camiseta negra suplente del equipo catalán), fueron los catalanes Mendetz, de los que ya os contamos en Indieófilo la potencia de su directo en una reciente actuación en el Let’s Festival. Ante un público impaciente por escuchar a los cabezas de cartel y con poco aprecio a los ritmos bailables que suelen ofrecer Oriol y compañía, el grupo optó por poner toda la carne en el asador desde un principio y enganchar al mayor número de personal posible. La respuesta, sin ser un clamor popular, si que se hizo notar y la desidia inicial por parte del respetable se tornó admiración y baile a los pocos minutos. Temas como "Plasticine" o la genial versión de "Freed From Desire" fueron animando a un público que se desató con el vendaval de canciones finales, entre las que destacaron las dos últimas "Escalera" y "Futuresex". Como siempre que les hemos visto en directo, Mendetz no solo cumplen si no que enganchan con su directo.
Tras un breve periodo de cambio de instrumentos, y con una música ambiente que parecía elegida por un enemigo (Limp Bizkit fue justo la canción previa al apagón de luces), los protagonistas de la noche, Love of Lesbian, aparecieron en escena ante el clamor de unas primeras filas enloquecidas. Unos acordes desconocidos mantenían la atención del público, ansioso por temas nuevos, justo momentos antes de que Santi Balmes se presentase con un escueto “Alguien tendrá que animaros esta noche ¿no?”. Los acordes correspondían con "Nadie por las calles", tema inédito que dejo un poco frio a un público ansioso de temas conocidos. La respuesta a la canción siguiente fue diametralmente opuesta pese a tratarse de un tema también nuevo como "Los Seres Queridos", demostrando que en estos tiempos de Internet y consumo voraz de música se precisan pocos días para que un material pase a alzarse a la categoría de himno.. Tras un breve recuerdo al pasado con "Niña Imantada", continuaba la presentación de nuevos temas, en esta ocasión "Wio" y "Si salimos de esta". La primera de ellas sonó con más fuerza que en las previas que pudimos disfrutar en Internet, mientras que la segunda, compuesta según afirmó el propio Santi Balmes en un momento delicado de la pasada gira, quizás sonó un poco descafeinada.
A partir de aquí, momentos de disfrute y éxtasis entre el público con una serie de canciones focalizadas sobre todo en su anterior trabajo 1999, que empezaron con "Malas lenguas", para posteriormente arrancarse con la más intima "Segundo asalto", continuar con una interpretación genial de "Los colores de una sombra" y atacar después la esperadísima por el público "Club de fans de John Boy" (momento de histeria colectiva), que sirvió como rampa de lanzamiento para otra de los éxitos seguros del nuevo disco, la coreada "Los días no vividos".
Tras esta canción se pudo vivir el momento más íntimo del concierto, que vino con la interpretación de la genial "Música de ascensores", que sin lugar a dudas fue recitada de memoria por los fans más perennes del grupo. El propio grupo iba anunciando que el concierto iba tocando a su fin a medida que cantaba éxitos como "1999" o "Allí donde solíamos gritar", hasta que decidieron que se despedían con una de las canciones nuevas que mejor sabor nos dejó, "Belice", que aúna una ritmo alegre con letras que nos recuerdan al Cuentos chinos..
Tras la insistencia de un público entregado, el grupo catalán volvió a salir a escena para interpretar de nuevo algunos de sus temas mas conocidos como "Incendios de nieve", "Noches reversibles" o "Algunas plantas" (nos faltó el típico baile con el que acababan los conciertos en la anterior gira), aunque sin lugar a dudas uno de los momentos de la noche fue la interpretación de "Me amo", ese himno a la autoestima que hizo saltar como locos a buena parte del recinto (incluido un servidor). Para cerrar el concierto, en una decisión que no fue muy bien entendida por la mayoría del público ávido de temas conocidos que poder cantar, el grupo optó por dos nuevos temas, la ya conocida "El hambre invisible", que sonó quizás poco guitarrera con respecto a su versión de estudio y la preciosa "Oniria e Insomnia", que a buen seguro se convertirá en un nuevo clásico de la banda al juntar de manera magistral un medio tiempo con una posterior entrada de guitarras y batería, recordando mucho a ese pequeño himno de la banda que es "Un día en el parque".
Así pues, gran noche la vivida en L’Hospitalet, con unos Mendetz que a buen seguro consiguieron que mucha gente que los desconocía previamente al concierto cuando llegase a casa, los buscase en youtube encantados con su música, y unos Love Of Lesbian magníficos como siempre en directo, que quizás no optaron por el setlist mas apropiado para el tipo de público presente en el recinto y que también sufrieron una ecualización bastante deficiente (la voz de Santi sobresalía sobre el resto de instrumentos, incluida una batería que casi no sonaba), pero que pese a ello demostraron que siguen siendo un cliclón en vivo y que las ganas del público presente por un nuevo disco les augura otro éxito descomunal en su próxima gira.
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